Capitulo 81 ♥

Luciana: No paso nada solo que hay que revisarte a vos y a la bebe y ver que todo esté bien.
Paula: ok
Cuenta Paula: Después de un rato ya estábamos en la clínica de Luciana, apenas llegamos la llevaron a Paz a darle las primeras vacunas.
Mientras esperábamos con Pedro que nos trajeran a Paz el me dijo…
Pedro: no sabes lo feliz que estoy mi amor.
Paula: yo también estoy feliz, más ahora que Pacita está con nosotros.
Pedro: no veo el momento de que vuelvan a casa conmigo, no sabes cómo las extrañe.
Paula: espera no te equivoques.
Pedro: ¿qué pasa ahora?
Paula: pasa que no voy a volver a vivir con vos.
Pedro: ¿Por qué?
Paula: porque a partir de este momento nunca más va pasar algo entre nosotros, solo vamos a ser los padres de Paz.
Pedro: ¿qué paso? si estábamos bien.
Paula: solo fue el momento de emoción por que llegaba Paz, pero no puedo perdonarte todavía.
Pedro: pero quiero que vivan conmigo estuve  más de dos meses sin ustedes y ahora que las encontré no me quiero separar de ustedes.
Paula: vas a poder visitar a Paz cuando vos quieras, pero nunca más vamos a estar juntos.
Pedro: ¿que mas tengo que hacer para que me perdones?
Paula: nada, solo que entre nosotros todo cambio, ahora es tarde.
Pedro: No me podes hacer esto, no podes alejarme de vos y de mi bebé.
Paula: No te estoy alejando de la bebé aunque tendría que hacerlo después de que la negaste.
Pedro: fue un error, pero vos ni siquiera me dejaste que te pida perdón ya que te escapaste como siempre.
Paula: Para que me iba a quedar al lado de alguien que dudó de mí y sobre todo negó a su hija. ¿Vos te diste cuenta que es igual a vos? ¿No sentís culpa al mirarla?.
Pedro: te juro que estoy arrepentido de todo pero no me alejes de tu vida ahora más que nunca las necesito.
Paula: Ya es tarde Pedro, pero ya te dije Paz va a ser siempre tu hija y vas a poder verla las veces que quieras.
Pedro: ¿No vas a cambiar de opinión verdad? (Triste)
Paula: No, Perdón.
Pedro: ¿Donde van a vivir?
Paula: De eso justo quería hablar con vos, asi me alquilas tu departamento porque para comprarlo no tendría la plata.
Pedro: No.
Paula: Pedro no me la hagas mas difícil por favor acepta mi decisión, bueno si no queres voy a tratar de conseguirme algo para las dos.
Pedro: Ves que nunca me dejas terminar de hablar.
Paula: Perdón. (Avergonzada)
Pedro: Dije que no porque no necesito que me alquiles nada, es de mi hija mi princesa. El departamento es de ustedes.
Paula: Pero....
Pedro: Nada de peros.
Paula: Bueno está bien.(Resignada)
Pedro: Otra pregunta.
Paula: Si decime.
Pedro: ¿Me vas a dejar darle mi apellido verdad? (Mirándome fijo pero a la vez con miedo)
Paula: Paz tambien es tu hija, obvio que tiene que llevar tu apellido.
Pedro: gracias, te prometo que no voy a defraudarte.
Paula: está bien. Eso espero.
Pedro: y que voy hacer todo lo posible para que vuelvas conmigo y seamos una familia.
Paula: No insistas por favor, todavía no puedo perdonarte del todo.
Pedro: ok, algo se me va ocurrir, no me pienso dar por vencido.
En ese momento entro Pao por la puerta, junto con una enfermera que traía a Paz
Pao: hola papis acá le taje a su bebe.
Paula: gracias Pao. (Sonriendo feliz)
Pedro: ¿como la encontraron a Paz?
Pao: bastante bien, es una bebe muy sana.
Pedro: ¿y Pau como esta?
Pao: muy bien ya le hicimos la curaciones necesarias, ahora solo tiene que disfrutar de su bebe.
Paula: es lo mas quiero ahora disfrutar de mi bebita.
Pao: Pedro, necesito si por favor podes ir a registrar a la bebe.
Pedro: enseguida vengo mi amor (yéndose)
Después de que Pedro se fue Pao me dijo…
Pao: ¿y arreglaron sus cosas?
Paula: no, aunque lo ame con toda mi alma, no le puedo perdonar que haya negado a su hija.
Pao: se equivoco tenes que darle una oportunidad, Paz no se merece criarse en un ambiente donde sus padres están separados.
Paula: Más adelante tal vez, ahora no puedo me lastimó demasiado con su desconfianza.

Y Paz solo va a estar rodeada de amor por parte de los dos y de toda la familia.
Pao: Y si esa es tu decisión Pau no queda otra que aceptarla.
Paula: Igual Paz ni va a notar ausencia de parte de Pedro porque conociéndolo va a estar las 24 hs del día metido en el dpto.. con su hija y no sé si voy a soportarlo.
Pao: ¿Tenés miedo a dejarte convencer? (Sonriéndome picara)
Paula: Mucho (riendo tambien)
Pao: Bueno parece que esta señorita ya quiere comer. (Agarrando a Paz que ya se estaba inquietando en la cuna)
Paula: ¿Tan pronto? (Dije sin pensar)
Pao: Jajaja ya es hora Pau, es su primera comida, dale gorda.
Paula: ¿Y cómo se hace? Yo no sé (Con cara de Pánico).
Pao: Ay Pau saca esa cara de pánico ni que fueras a matar a alguien. Ella tambien te va a ayudar no te preocupes, vas a ver qué vas a saber qué hacer.
Paula: ¿Vos decís? (Dudando)
Pao: Claro que si, tu instinto maternal va a aflorar, tranquila. Bueno me voy asi vos le das de comer tranquila, cualquier cosa que necesites estoy en mi consultorio. (Dándome a la bebé en brazos que ya empezaba a llorisquear)
Paula: Bueno Gracias. (Viéndola salir de la habitación).
Paola se fue y me dejó sola con la bebé
Paula: ¿Ya quiere comer mi bebé? (Hablándole tierna a Paz)
Mamita va a darte de comer pero vos también la tenés que ayudar ¿sí? Te amo tanto mi princesa (Besando su frente).
En ese momento la acerqué a Paz hasta mi pecho, asi se prendía de él, pero no había caso, cada vez que intentaba darle el pecho, Paz me rechazaba.
Paula: dale Paz no seas mala con mamá (comenzando a llorar).
Fue cuando entró Pedro con un ramo de flores y un osito.
Pedro: ¿qué pasó?
Paula: Paz me odia, no me quiere.
Pedro: ¿cómo vas a decir eso?
Paula: es la verdad, le intenté dar de comer y me rechaza (angustiándose)
Pedro: Pau ella te ama, haber dámela, primero cálmate.
Paula: no sirvo para ser madre sí mi hija no me quiere.
Pedro: vos sos una gran mamá y ella lo sabe, entre los dos vamos a saber cómo ser padres.
Paula: quizás me rechaza, porque sabe que al principio no la quise.
Pedro: No digas tonterías pesa mucho más todo el amor que le diste y le estas dando. Tiene la boca muy chiquita, sumado a tus nervios le transmitís eso, por eso no quiere comer. (Agarrando a la bebé que se habia calmado en sus brazos).
Paula: Se calmó (Sorprendida)
Pedro: Eso es porque yo le trasmito tranquilidad, trata de calmarte y probamos de vuelta. (Meciendo a la bebé por el cuarto).
Paula: Está bien (con lagrimas en los ojos).
Pedro: No quiero que llores es normal dale, cálmate ¿sí? (Mientras besaba el cachete de nuestra hija)
Paula: Voy a calmarme porque en cualquier momento vuelve a llorar del hambre. (Haciendo las respiraciones que me habían enseñado en el curso).
Pasaron como diez minutos más o menos en los que ya me sentía relajada, Pedro estaba sentado en el sofá que habia ahí con Paz en sus piernas.
Paula: Pedro.
Pedro: ¿Qué pasó?
Paula: Ya estoy lista, probemos de vuelta ¿sí?
Pedro: Por supuesto que sí. ¿Verdad que ahora si vas a comer princesa? (Besando su frente).
Paula: Pásamela que ya estuvo mucho tiempo lejos de mí. (Estirando mis brazos para que me la dé).
Pedro: Ay que exagerada, estaba con su papi ¿verdad mi vida? (Besando su cachete mientras se acercaba y me la daba en brazos).
Paula: Si pero tiene que estar con su mami ¿verdad mi princesita linda? (Besando su cachete, se empezaba a inquietar de vuelta).
Pedro: Ya tiene hambre, inténtalo de vuelta Pau, pero tranquila. Tenés que estar calmada para que ella sienta eso y pueda comer.
Paula: Ok, ¿te podes ir?
Pedro: Eh?
Paula: Si para darle de comer, no da que me veas una lola.
Pedro: Si es verdad, ay Paula deja de decir tonterías como si nunca te la hubiera visto.
Paula: Bueno está bien, pero no mires.
En ese momento traté de vuelta darle el pecho a Paz y estaba que no se prendía de vuelta y llorisqueaba.
Paula: No quiere Pedro (Empezaba a angustiarme)
Pedro: Tranquilízate que le pasas los nervios asi gorda. (Acercándose a nosotras)
Paula: No quiere Gordo.
Pedro: Haber movete un chiqui hacia adelante. (Subiéndose a la cama y sentándose detrás de mí)
Paula: ¿Qué haces?
Pedro: Quédate tranquila, yo sé lo que hago (Dándome un beso en el cuello)
Paula: Pedro.
Pedro: Perdón. Bueno ahora tranquilízate asi le das de comer a Paz.
Paz se fue calmando poco a poco a medida que me tranquilizaba yo tambien hasta que se prendió de mi pecho y empezó a comer, yo estaba feliz hasta el punto de derramar unas lágrimas mientras que Pedro le acariciaba la manito.
Paula: ¡Está comiendo! (Emocionada)
Pedro: Si te dije que cuando te calmaras ella tambien lo iba a hacer. (Sonriendo)
Un rato después llegaron nuestros familiares y amigos a conocer a Paz, estuvieron disfrutando de la bebe y después se fueron ya que se habia terminado el horario de visitas.
Ya habia pasado una semana de que habia nacido Paz, Pedro casi se habia instalado en el dpto.

Todos los días venia y me ayudaba con ella y no se iba a su casa hasta que Paz no esté dormida.
Cada vez que nos visitaba venia lleno de regalos para ella y para mi, amaba la relación que habia entre ellos, era un amor puro entre padre e hija.
Hoy me encontraba sola con Paz, después de darle de comer logre que se durmiera.
Hasta que sonó el timbre muy fuerte y ya tenía ganas de matar a la persona que tocaba de esa manera.
En ese momento cuando abrí la puerta me dijeron…
XXX: hola. Soy su nuevo vecino y venia a presentarme con usted.
Paula: ¿se puede saber que haces acá?
XXX….

 

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